Se trata de una lesión muy grave, en la que se pierde la congruencia normal de una articulación. Es dramática para el que la sufre, presenta gran dolor, deformidad y absoluta impotencia funcional.

Cualquier articulación puede luxarse, siendo lo más habitual las articulaciones pequeñas de los dedos, luego el hombro y más abajo, el codo, rodilla o cadera.

Un paciente que ha sufrido una luxación articular debe ser evaluado por un médico especializado, que solicitará un estudio de imágenes y señalará un tratamiento bien planificado, pues se trata de una lesión grave, que puede dejar secuelas, advierte el especialista.

Luxaciones